Una mala vida

El hombre ha sido creado de tal manera que todo lo que quiere, piensa y hace se le aparece como si estuviera realmente en él y proviniera, por lo tanto, de él. Sin esta apariencia el hombre no sería hombre, porque no podría recibir, retener y (…) apropiarse para sí nada que sea bueno o verdadero, ni propio del amor y la sabiduría. (…) Sin esta apariencia viva, el hombre no sería capaz de la conjunción con Dios, y por lo tanto tampoco de la vida eterna. Pero, si gracias a esta apariencia, induce en sí mismo la creencia de que es él mismo quien quiere, piensa y (…) hace cosas buenas, y que no lo es por el Señor, convierte el bien en mal, en su interior, y constituye (…) en sí mismo el origen del mal. Este fue el pecado de Adán. (CL 444)

El amor del cual se hacen los actos es o bien celestial o bien infernal. (…) Los actos que se hacen desde el amor infernal que es el amor a sí mismo y al mundo, son hechos desde el hombre mismo, y todo cuanto es hecho desde el hombre mismo es malo; porque el hombre, en cuanto a lo que le es propio no es más que maldad. (HH 484)

El hombre, cuando nace, es entre todos los animales y bestias salvajes, la criatura viviente más vil. Cuando crece y se convierte en su propio amo, si no se lo impiden las ataduras externas de la ley, y las ataduras que él se impone a sí mismo con el objetivo de obtener ganancias en términos de honor y riqueza, se precipitaría a toda suerte de crimen y no descansaría hasta no haber subyugado todo lo que existe en el universo y haberse apropiado de las riquezas de todos los demás hombres. (…) No perdonaría a nadie, salvo a aquellos dispuestos a someterse a su servidumbre más humilde. Tal es la naturaleza de cada hombre. (…) Si esta posibilidad y poder se le dieran, y si se aflojaran las ligaduras que lo contienen, continuaría precipitadamente en esa dirección en la medida de su habilidad.

[Pero] el Señor (…) gobierna el mal en el hombre y el infierno que posee en su interior. A fin de que el mal que hay en el hombre pueda ser subyugado (…) el hombre es regenerado por el Señor y dotado de una nueva voluntad, que es la conciencia mediante la cual es el Señor mismo, y únicamente él, quien ejecuta todas las buenas acciones. Estos son puntos de la fe:, Que el hombre no es otra cosa sino malo, y que todo bien procede del Señor. (AC 987)


Category: Temas Espirituales

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